Des de 1980/81 treballant per la Cultura en general, la Valenciana i especialment la de Paterna.



viernes, 26 de octubre de 2018

Excursión de Otoño

Andújar, Baños de la Encina, Linares y Jaén 
del 11 al 14 de Octubre

Nada mejor para celebrar la llegada de este inseguro otoño, que disfrutar de la excursión que nos ofrecía nuestro Ateneo aprovechando el “Puente de Octubre”. Jaén, Andújar, Baños de la Encina y Sabiote eran lugares que prometían encontrar paz entre sus olivares al tiempo que nos reencontrábamos con amigos de “toda la vida”.

Olga, nuestra servicial guía, nos dio las gracias por confiar en su empresa  y nos presentaba a Juan Miguel un conductor seguro y prudente en quien confiar. Ángel y Aurelio nos iban recibiendo en la puerta del autobús dándonos la bienvenida y la información necesaria. 

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Una hora antes de la llegada al hotel, cuatro estrellas, “Ciudad de Úbeda” el paisaje se llenó de olivos y la música al son de fandangos y alegrías, que nos puso Juan Miguel, nos fue envolviendo del espíritu de Miguel Hernández y parecía que nos preguntaba: 

“Andaluces de Jaén, aceituneros altivos, decidme en el alma: ¿quién, quién levantó los olivos”.



El día terminó entre cena ligera, café, tertulia y con música que invitaba al  baile, y con deseos que  amaneciera el  “Día de Hispanidad y de las Pilares” para visitar JAÉN la «capital del Santo Reino y de la santa Faz».

Los Baños Árabes de Jaén, conocidos como Baño del Niño, están ubicados en los sótanos del Palacio de Villardompardo. Cuentan con una extensión de 450 m², lo que los convierte probablemente en los más grandes de España. El Castillo de Burgalimar, la Iglesia de San Mateo, en cuyo sagrario se encuentra una pintura atribuida a Murillo, y donde Mayte nos deleitó cantando  el Avemaría de Schubert.


Quedamos sorprendidos al acercarnos a los alrededores de La Santa Iglesia Catedral de la Asunción de la Virgen de Jaén al ver concentrados un gran número de Guardias Civiles vestidos de gala, dispuestos a desfilar ante su patrona la Virgen del Pilar. No éramos de Jaén ni “hijos del Cuerpo” pero ante los gritos de ¡!Viva España y Viva la Guardia Civil” sentimos unos cosquilleos que invitaban a responder: ¡Viva!.

Los esfuerzos de Alejandra, la guía local, por mostrarnos la Catedral, luchaban contra los acordes de las marchas militares de la explanada. Recordamos de su ilustración que la catedral fue creada en el siglo XVI para sustituir al anterior templo gótico del siglo XV. Se detuvo en  la sala capitular y la sacristía, obra cumbre de Andrés de Vandelvira. Nos llamó la atención su comentario al monumental órgano del coro cuando nos aclaró que los tubos que faltan fueron requisados en la “Guerra Civil” para la fabricación de “balas”.

Comida en carretera con menús y caldos típicos de la zona, que según Ángel nuestro presidente,  eran tan buenos, que era  “un insulto mezclarlos con gaseosa”. A la entrada DE BAÑOS DE LA ENCINA nos esperaba la guía “Juani” para mostrarnos algunos de los monumentos de la ciudad, inscritos en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz. Cena en el hotel, relax , copa, baile  y descanso.

La mañana del sábado se dedicó a visitar el Santuario de Nuestra Señora de la Cabeza en ANDÚJAR.  Nos decía el guía local Carlos, que es una lástima que no construyan un acceso al santuario sin curvas tan pronunciadas  y con carreteras más anchas. A nivel privado nos comentó que les estaba “vetado” hablar de temas religiosos y políticos.

Comimos en “el Parral” un afamado restaurante de carretera donde nos sirvieron unos aperitivos  de tortilla de verduras de la tierra, salmorejo y guisado de caza, regados con vino cosecha de la tierra. La tarde la dedicamos a ver la  ciudad monumental de ANDÚJAR. Su Muralla urbana (B.I.C. 25/06/1985). El Antiguo Hospital de la Caridad (B.I.C.- 29/09/1980) Palacio Municipal de Andújar (B.I.C.- 29/09/1980). Puente romano de Andújar.
Regresamos a ÚBEDA, donde la dirección del Ateneo, ante la importancia de sus monumentos, contrató  el “El Trenet turístico” que nos hizo el recorrido, al tiempo que la guía comentaba  los lugares más significativos de la ciudad.



Por la calidad y buena conservación de sus numerosos edificios renacentistas y de su singular entorno urbanístico, pudimos comprobar el porqué fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco el 3 de julio de 2003.                                                                                                                

En la mañana del domingo  visitamos  SABIOTE , una villa a 7 km de Úbeda, poco conocida, hasta que  supimos que forma parte de la más amplia Ruta del Renacimiento y que fue declarada "Conjunto Histórico-Artístico" de carácter nacional en el año 1972. Es un pueblo milenario en cuyas tierras se han encontrado restos de la Edad del Bronce. Con la conquista de España por los árabes, Sabiote adquiere mayor importancia debido a su carácter estratégico-militar y se fortifica con muralla y castillo a partir del siglo XI. 

A pesar de la lluvia que nos acompañó gran parte de la mañana,  toda la villa presentaba un estado de conservación excelente, casas blasonadas muy cuidadas y calles bien conservadas adosadas a la muralla. Nadie esperaba ver en un pueblo de 4.500 habitantes, la monumental  iglesia de San Pedro, de estilo renacentista, su bello claustro con arcadas de medio punto y columnas dóricas. 

A la pregunta que se le hizo al simpático guía Ramón, del porqué ondeaba una bandera blanca  en lo más alto de la espadaña del campanario, nos aclaró que es costumbre del pueblo el izarla cuando un “sabioteño” canta misa.

De vuelta a Úbeda para comer y ante el pronóstico climático desfavorable, adelantamos la marcha hacia “la patria chiqueta” con la esperanza de  evitar los  atascos de tráfico propios de un largo puente. Entre caramelo y caramelo, Aurelio nos invitó a programar la próxima excursión de primavera,  mientras  Ángel Alcañiz nos regalaba unos bellos almanaques del 2019.

Mayte, divisando ya la “Torre negra i moruna” tomó la voz cantante del himno y aparcando el autobús sentimos que ya estábamos en la "Vila del meu cor que no canviaria pel més preciat tesor”. 

Hasta la próxima, y  mientras, a ser felices.
Félix Garrido Gil.

(c) Fotos: Vicente Blanco y Félix Garrido.